Desde el siglo XII, cada 15 de mayo, se realiza en la ciudad italiana de Gubbio una competencia conocida como Carrera de los cirios, la cual consiste en que 3 equipos de aldeanos, deben cargar a uno de los santos: San Ubaldo quien es el patrono de la ciudad, San Antonio y San Jorge.
Esta celebración surgió en honor de la muerte de Ubaldo Baldassini. La población decidió conmemorar al Santo Patrono con una procesión sagrada y misteriosa en la que los hombres de la ciudad llevan grandes palos de cera por las calles hasta la Basílica del Monte Ingino, que es donde se encuentran los restos de San Ubaldo.
Una vez dada la orden de salida los “ceraioli”, salen a toda velocidad mostrando una gran habilidad, su objetivo es que el cirio siempre esté lo más vertical posible y obviamente, ser los primeros en llegar a su destino. Extrañamente, en sus más de 8 siglos de existencia, todos los años la carrera la gana quienes cargan a San Ubaldo.
Hoy en día, las velas originales han sido reemplazadas por 3 estructuras gigantes de madera que tienen en la parte superior una pequeña estatua del Santo. Según la tradición, sólo los hombres pueden llevar a Ceri usando trajes tradicionales, de hecho el color de la camisa que llevan depende del Santo que representan: azul para San Giorgio, amarillo para San Ubaldo y negro para San Antonio.
Samantha Aguilar
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