LA PIRÁMIDE DEL SOL

DESCUBRE MÉXICO

Ubicada en la Calzada de los muertos, entre la Pirámide de la Luna y la Ciudadela en Teotihuacán “La ciudad de los Dioses” (Estado de México), La pirámide del Sol es sin lugar a dudas la estructura más grande de este recinto y la segunda más grande de Mesoamérica.

Se cree que la pirámide fue construida en el año II d.C. con ayuda de la técnica del talud y el tablero (Sistema arquitectónico teotihuacano, formado a partir del uso de un muro basal inclinado, talud, sobre el que se levanta un muro rectangular, tablero).

Fue el arqueólogo mexicano Leopoldo Batres quien en los años 1905 – 1910 comenzó su excavación, aunque por desgracia, su trabajo la deformó prácticamente en su totalidad.

Actualmente, tiene un altura de 65 m pero se cree que en realidad era más alta ya que se dice que en la cima se encontraba un templo el cual fue destruido por los mismos teotihuacanos, aunque sólo se sabe con certeza que en el siglo XVI el obispo Zumárraga ordenó destruir el enorme ídolo de piedra que se encontraba en la cima de la pirámide; su base es de 200 x 225 m y la escalinata es de 243 escalones.

En 1971 se descubrieron una serie de grutas debajo de ella, en las que hay 4 puertas dispuestas como el pétalo de una flor, que dan acceso a otras salas. Parece ser que estas grutas simbolizan el origen del hombre. Sin embargo, lo más sorprendente de la pirámide es que está orientada de modo que señala el movimiento del Sol desde el amanecer hasta el anochecer, e incluso los equinoccios; de aquí su nombre… “La Pirámide del Sol”.

Recientemente se encontró en la cúspide de la pirámide la escultura más grande, hallada hasta ahora, de Huehuetéotl (Dios viejo o Dios del fuego) ya que tiene una altura de 58 cm y pesa 190 kilos; además de 2 estelas de piedra verde que se creen debieron ser parte de la decoración del templo hace 1,500 años.

Con estas última excavaciones se puede confirmar que la pirámide original medía aproximadamente 70 m de alto y que además fue construida durante el siglo II d.C. aunque en el siglo III se amplió, es decir la hicieron más ancha.

Samantha Aguilar