Fue el 28 de enero de 1958 a las 13:58, cuando Godtfred Kirk Christiansen presentó una solicitud de patente de unos ladrillos para un juguete de construcción en Copenhague, Dinamarca; sin embargo, la historia de este juguete inició en 1947, cuando Ole Kirk Kristiansen (fundador de LEGO) fue introducido a un nuevo material, el plástico por un vendedor británico, quien vendía máquinas de moldeado de plástico.
El vendedor recorrió Dinamarca visitando varias compañías de juguetes, y presentando un ladrillo hecho de plástico como una gran idea de negocio, fue la familia Kirk Kristiansen quien creyó en su potencial.
Los primeros ladrillos Automatic Binding Bricks salieron en 1949, y estaban vacíos y tenían una ranura en cada extremo, dónde se podía acoplar ventanas y puertas. En 1953, el nombre cambió a LEGO Mursten (la palabra danesa que significa ladrillo) e inició un proceso creativo para mejorar los ladrillos pero sobre todo, su potencia de encaje.
Cabe mencionar que la empresa LEGO fue fundada en 1932 por Ole Kirk Christiansen pero hasta 1949 se dedicó casi exclusivamente a producir juguetes de madera. El nombre de LEGO surgió por la combinación de las dos primeras letras de las palabras Danesas: LEg GOdt (Juega bien).
En 1955, fue lanzado el LEGO Town Plan nº 1 cuyo concepto base era el de aprender jugando. A la par, los creadores seguían trabajando para mejorar la potencia de encaje del ladrillo teniendo en cuenta dos aspectos: la creencia fundamental de la compañía en las ilimitadas posibilidades de juego y la mejora de la calidad del producto.
Finalmente en 1957 se encontró la solución, un sistema de construcción consistente en un ladrillo con tres tubos en el interior que tenían una unión perfecta de tres puntos con los tachones de la parte superior del ladrillo. Sin embargo Godtfred Kirk Christiansen continuó buscando vías alternativas para conseguir potencia de encaje.
La solicitud de patente de 1958 incluyó los esquemas y principios de la inyección de plástico para cinco distintas soluciones. Desde entonces, la patente ha sido registrada en 33 países de todo el mundo.
Y es que “sencillo” juguete basado en un ingenioso sistema de interconexión y el casi ilimitado número de posibles combinaciones, sentó los cimientos de lo que se convertiría en una marca mundialmente famosa LEGO® y que desde entonces ha ganado 2 veces el premio Juguete del Siglo.
Samantha Aguilar
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