Hay que recordar que una fobia es un miedo irracional y exagerado que produce ansiedad y angustia y suele controlar la vida de quienes las padecen y como cualquier ser vivo, objeto y/o situación pueden desencadenar una fobia, existen muchos tipos, uno de ellos es la ergofobia.
El término ergofobia se utiliza para referirse al miedo excesivo ante situaciones relacionadas con el trabajo; y aunque se trata de una de las fobias más raras que existen, tiene mucho sentido tomando en cuenta que la mayoría de las personas reconocen sufrir mucho estrés en el trabajo.
Se trata de un temor el momento de acudir a la oficina, estar en el puesto, asistir a reuniones o llevar a cabo determinadas tareas. Tal es el grado de ansiedad, que la fobia acaba repercutiendo negativamente en las funciones laborales. La ergofobia también se ha dado en casos de búsqueda de empleo.
Las personas que sufren de este trastorno suelen tener los siguientes síntomas:
Pérdida o dificultad para mantener la concentración en el trabajo.
Pensamientos negativos recurrentes sobre el trabajo fuera del horario
laboral.
Angustia al aproximarse el inicio de la jornada laboral.
Malestar físico antes o durante la jornada laboral sin justificación
médica.
Pérdida del sueño o problemas para mantener una buena rutina del sueño.
Cabe mencionar que si es verdad que algunas fobias son más sencillas de manejar ya que no te expones continuamente al motivo, la ergofobia es un trastorno muy limitante que puede llegar a complicar mucho la vida ya que al estar expuesto tanto a motivo de tu miedo es más probable de que sufras ataques de ansiedad y/o de pánico, los cuales dificultarán más tus funciones.
Samantha Aguilar
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