Actualmente en el mundo hay 195 países reconocidos, cada uno de ellos tiene su propia identidad reflejada en su cultura, historia, gastronomía, paisajes… Y la mayoría de ellos, cuentan con una selección nacional de fútbol y por lo general, el uniforme que visten de local suele ser dominado por uno de los colores de la bandera del país sin embargo, esto no ocurre con todos los países.
El emblemático color azul de la camiseta de la selección italiana de fútbol se remonta a los inicios del siglo XX. Se escogió en honor a la Casa de Saboya, la dinastía que reinaba en Italia cuando se formó la Federación Italiana de Fútbol (Federazione Italiana Giuoco Calcio, FIGC), en 1898.
Este color fue utilizado por primera vez el 6 de enero de 1911, en un partido contra Hungría, el cual perdieron; pero no fue hasta 1922 que fue adoptado de forma oficial y desde entonces, el equipo es conocido popularmente como los “Azzurri”, que significa “azules”.
Es importante mencionar que la Casa de Saboya gobernó Italia desde 1861 hasta la abolición de la monarquía en 1946. El azul, conocido como “Azul Saboya”, formaba parte de su estandarte y se decía que este color era en honor al manto de la Virgen María.
El azul de la playera no solamente se utiliza en el fútbol, sino que se ha extendido a varias disciplinas deportivas por lo que, aunque este color no aparece en su lábaro patrio, definitivamente se ha convertido en un símbolo de identidad nacional y orgullo, representando a Italia en competiciones internacionales.
Samantha Aguilar
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