Los arcoíris son un fenómeno óptico y meteorológico que surge como
consecuencia de la dispersión de la luz del sol cuando se
refracta, es decir cuando se desvía su dirección y se refleja en las gotas de
agua de lluvia. Sin embargo, a diferencia de los convencionales, los arcoíris de fuego también conocidos
como arcoíris circunhorizontales, son
más cortos pero de mayor espesor se podría decir que aparecen en el cielo en forma de flamas de colores, que apuntan en
una sola dirección.
Los arcoíris de fuego son unos de los fenómenos naturales más raros ya
que para que aparezca uno, es necesaria la refracción
de la luz a través de cristales de hielo presentes en las nubes cirros (tipo
de nube que se compone de cristales de hielo, debido a que se encuentran a una temperatura de 40
grados bajo cero); pero además, el Sol debe de estar a 58º sobre el horizonte
para que de esta manera, la luz impacte los cristales de hielo.
Samantha Aguilar
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