Sin lugar a dudas, el Eucalyptus deglupta (El eucalipto del arcoíris) es uno de los árboles
más increíbles y aunque su hábitat natural son las latitudes tropicales, se ha
extendido a otras partes del mundo.
Se trata
de un esbelto árbol cuya característica principal son los colores de su tronco los cuales lo dotan de una inusual belleza,
por lo que no es de extrañar que actualmente se utilice como árbol ornamental.
Resulta
común que al verlos por primera vez lleguemos a creer que el tronco haya sido
pintado artificialmente, sin embargo cabe aclarar que su fascinante combinación
de colores se produce de manera natural en las distintas capaz de su corteza, lo
cual además de indicar la edad del árbol (ya que a medida que envejece va
cambiando de tonalidad) también lo ha convertido en una maravilla de la
naturaleza… Pero esta no es la única razón por la que es considerado uno de los
árboles más sorprendentes.
El árbol arcoíris
crece muy rápido, es capaz de llegar a
los 50 metros en tan sólo 20 ó 25 años, es por ello que es considerado uno de los árboles de más rápido crecimiento;
además, llegan a medir más de 70 m de altura.
Estos tipos de árboles requieren de terrenos
fangosos y húmedos para extender sus raíces pero además mucha luz, y aunque la
mayoría de los ejemplares se encuentran en Nueva
Guinea, Nueva Bretaña, Sulaewsi y Mindanao, la verdad es que este árbol es originario de Maui (Hawái)
y actualmente es cultivado en todo el mundo para obtener papel.
Samantha Aguilar
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