Criaturas mitológicas
Se trata de una criatura perteneciente a la mitología
azteca, cuyo nombre significaba "espina
de río", la cual tenía forma de perro, manos de simio y una larga cola
que termina en una mano y la cual utilizaba para ahogar a los incautos quienes
eran atraídos imitando el llanto de un bebé o haciendo que los peces y las
ranas saltaran, como si los acechara un pez enorme.
Debido a que se trata de una criatura marítima
(habitaba el lago de Texcoco) era temido principalmente por los pescadores, el Ahuízotl era famoso por su apetito
desmedido y su predilección por la carne humana. Cuando la víctima estaba a su
alcance, la atrapaba con la mano en la punta de su cola y la arrastraba al agua.
Sus víctimas eran perfectamente reconocible debido
a que el cadáver emergía
exactamente 3 días después del ataque, sin ojos, dientes ni uñas, los
cuales son los alimentos predilectos de esta criatura.
Debido a que era considerado uno de los hijos
de Tláloc, sus víctimas eran consideradas sacrificios a los Dioses, por lo
que estaban destinados a morar por la eternidad en el paraíso del Dios de la
lluvia.
Samantha
Aguilar
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